Antes que entrenador ,padre.

Vivimos en un mundo donde la palabra PROHIBIR ,esta de moda .Prohibido esto ,prohibido aquello, pero donde general mente quienes impulsan estas leyes son los primeros en no cumplirlas. Ahora mismo hay clubes de fútbol que ponen sobre la mesa la opción de prohibir la presencia de padres en los entrenamientos de sus hijos. Es esto correcto ? Puede alguien decirle a un padre, tienes prohibido ver como trabaja su hijo o tienes prohibido ver como trabajo con tu hijo.? Es cierto, hay padres que creen que tienen el derecho a decirles a los entrenadores como debe hacer su trabajo ,cuando a lo mejor ni siquiera tienen idea de entrenamientos, ni tácticos, ni físico ;no porque sean incultos,solo porque no es su especialidad, así también como un entrenador, tampoco podría ir a decirle a un padre como debe criar a su hijo, porque el mismo no es padre. Te imaginas a un enfermero que esta presenciando una operación a corazón abierto diciéndole al cirujano ,como lo tiene que hacer, o viceversa el cirujano diciéndole al enfermero como debe colocar una inyección. O lo que es peor al cirujano diciéndole al enfermero que no lo nesecita durante la operación? Creo que cada uno tiene que cumplir su papel en la vida, los clubes el suyo, los entrenadores el que les corresponde y los padres el que Dios les a dado, educar en casa a sus hijos para que sean hombres y mujeres de bien en la vida antes que deportistas. Cuando cada uno comprende cual es su papel y sabe donde están sus limites y respeta el trabajo , sacrificio y responsabilidad de los demás, la palabra PROHIBIDO desaparece ,porque el club hará su trabajo apoyado en entrenadores cuidados y capacitados para hacer su labor, los entrenadores comprenderan que no son dioses y dueños de la verdad absoluta y se esforzaran por dar todo de si en pos del crecimiento deportivo de los niños y los padres entenderán que la educción empieza en casa y que si han confiado a sus hijos a un club deben respetar su trabajo y esperar resultados y si no son los que esperaba siempre con buena voluntad y educacion podrá hablar, debatir, cuestionar, pero no desde la grada y a grito rasgado, sino desde el civismo y el buen ser.
Cuando todos comprendemos nuestro papel dentro y fuera de un campo deportivo y RESPETAMOS a los demás, tratándolos como a nosotros mismos nos gustaría que nos trataran,no tenemos la necesidad de prohibir a nadie, que vea, disfrute y anime a su hijo desde la grada,aun cuando solo sea un entrenamiento. Si los padres no están en la grada en los entrenamientos ,como comprenderan, porque su hijo juega mas o menos que otro jugador o porque no fue convocado. Si ese padre esta presente y ve lo que sucede tendrá la oportunidad de ayudar a su hijo, no a compararlo con otro, pero si animarlo a que mañana lo haga mejor o que simplemente no baje los brazos esperando su momento. Los hijos nesecitan ver que sus padres están orgullosos de su trabajo ,que los acompañan en sus éxitos y sus fracasos ,nesecitan tener un referente en la grada que le esta dando el ejemplo de como tratar a los demás, de como relacionase con lo demás y que cuando termine su trabajo tenga a quien ir corriendo a sus brazos buscando esa complicidad que solo un padre o madre puede ofrecer.
El fútbol sin gente en las gradas,sin pasión, sin color no tiene vida. Pero seguramente cuando cada uno comprenda el papel que desempeña será mejor y mas puro, pero sobre todas las cosas hará posible que nunca mas escuchemos Prohibido ver y disfrutar de lo mas bonito que hay en el mundo, el fútbol en todas sus expresiones.